Latinos frustrados con los demócratas abrazan a Trump en el crucial estado de Nevada
Frustrados con los demócratas por temas como economía e inmigración, muchos latinos en el crucial estado de Nevada aseguran que votarán por Donald Trump en las presidenciales de noviembre en Estados Unidos, un apoyo que puede ser decisivo para el republicano.
María Salinas, quien administra un puesto de jugos en un mercado en el norte de Las Vegas, cuenta que varios familiares durante años han buscado una manera de regularizarse en Estados Unidos, lo que la motivó a apoyar a los demócratas en 2020.
"Pero nada. Promesas y promesas (...) pero nada cambia para nosotros", lamenta.
Esta decepción la motiva a votar por los republicanos el 5 de noviembre: "Yo creo que Trump puede cambiar un poco las cosas".
Los latinos, el segundo mayor grupo poblacional electoral de Estados Unidos, representan 22% de los votantes en Nevada, lugar a donde miles de migrantes han llegado atraídos por la promesa de trabajo en los cintilantes casinos y los efervescentes espectáculos de Las Vegas.
El cambio ocurre en mal momento para los demócratas, que tras dominar las presidenciales en Nevada desde 2008, llegan a estos comicios con una ventaja de apenas medio punto.
"Yo nunca he entendido por qué a fuerzas (obligatoriamente, ndlr) dicen que los latinos tenemos que ser demócratas", dice Javier Barajas, un empresario de 65 años.
"Los demócratas nunca nos han ayudado nada", agrega el mexicano que cruzó la frontera hace cuatro décadas y terminó por accidente en la 'capital del pecado', como se conoce a Las Vegas.
Allí construyó un emporio gastronómico piedra por piedra, pero alcanzó su verdadero sueño americano al recibir en sus restaurantes este año a Trump y al presidente Joe Biden, justo antes de que cediera la candidatura a Kamala Harris.
Estrecharle la mano a Biden fue "algo muy grato, un orgullo".
Pero Trump "fue más que un honor, porque es la persona correcta para este país", afirma Barajas, quien atesora los botines dorados con el sello de Trump que le regalaron tras la visita.
Muestra del cambio de los vientos es el entusiasmo con el que Barajas habla en público de su preferencia política.
"Ahora, sí, lo digo, lo digo porque estoy muy molesto con los demócratas, porque son puras promesas. (...) Y esta es la forma de decirles 'Ok, ya basta. No estamos de acuerdo con ustedes'. Necesitan ya tomarnos más en serio".
- Margen cada vez menor -
Aunque los latinos siguen favoreciendo a los demócratas, el margen se ha reducido.
En 2012, el 71% de los latinos en Estados Unidos votó azul, el color de los demócratas, y el 27%, rojo, de los republicanos.
Ya para 2020, los republicanos ganaron terreno al conquistar 32% del electorado latino, frente a 66% de los demócratas.
Una reciente encuesta de UnidosUS apunta que 57% de los latinos se inclina por Harris este año, en tanto que 34% lo hace por Trump.
Algunos votantes atribuyen el desencanto al aumento del costo de vida y las políticas migratorias.
Barajas, por ejemplo, cree que las promesas de deportaciones masivas de Trump de llegar a la Casa Blanca sólo impactarán "a los delincuentes".
"Él no irá contra los trabajadores", afirma el hombre que durante la visita de Trump le explicó que muchos latinos lo desprecian por su retórica anti-inmigración.
Barajas no se lo toma personal. Y no es el único.
La mayoría de los hispanos en Estados Unidos cree que Trump no habla de ellos cuando acusa a los migrantes de comerse las mascotas de los estadounidenses, ser criminales y de infectar la sangre de su país, de acuerdo con una encuesta de The New York Times de este mes.
- "Mejorar la comunicación" -
La irrupción de Harris en la campaña mejoró la tracción de los demócratas entre los latinos en comparación con Biden debido al tema identitario.
"(Harris) es producto de padres inmigrantes", dijo Ricardo Fernández, de 54 años, para quien los demócratas necesitan mejorar su comunicación con la comunidad.
"Muchos latinos no están bien informados (...) sobre qué es lo que se está jugando aquí", sostiene el empresario.
"Estamos hablando de una candidata que habla con afán de ayudar a la clase media y un candidato (...) cuyo plan es fortalecer a los multimillonarios. Entonces ¿el latino en dónde va a quedar? ¿Cuántos latinos son millonarios aquí en Estados Unidos?".
Es una preocupación latente en el norte de Las Vegas, un bastión latino en donde funciona el Broadacres Market, un enorme y colorido mercado de pulgas.
Allí los trabajadores, abrumadoramente hispanos, repiten que la economía y, para algunos, la falta de documentos son las prioridades.
Carlos Reyes, de 57 años y a cargo de un puesto de camisetas, dice sentirse más inclinado a apoyar a Harris porque "empezó como cualquiera, desde abajo".
Pero sigue indeciso a dos semanas de la elección.
¿Qué le falta?
Escuchar a Trump.
(P.Tomczyk--DTZ)